Camino a la felicidad

De repente tu vida da un giro de 180º. Un día en el que no lo esperas, descubres un mundo, un fantástico mundo cargado de alegrías, superaciones y también cosas tristes, pues siempre donde hay alegría hay tristeza, pero en este caso lo bueno pesa mas que lo malo.
Un día algo te llama la atención, algo que ves desde dentro, nada superfluo, algo mágico, algo que te toca la patata y te da que pensar. Y empiezas a imaginar, y mientras imaginas una enorme sonrisa aparece en tu cara, y piensas: ¿Es este mi camino?
¡Y aquí estoy hoy! Zancada a zancada haciendo mi camino. Se que la meta esta lejos, a lo corto 3 años caminando, y eso espero, que no se demore. Hace dos semanas cruce la salida, y a los dos días después, tuve que superar dos muros. La verdad es que no salte mucho para poder superarlos, pero para ser de los primeros, estar tan cerca de la linea de salida, y tener tan poco espacio para coger carrerilla, los pude superar con éxito. Eso si, espero que, en los siguientes que aparezcan poder saltarlos con mas holgura. 
Este camino es maravilloso, lleno de colores y olores a mi paso, preciosas aves que revolotean encima mío, con mil oportunidades al levantar cualquier piedra de sus márgenes. Sin duda, pasear por aquí es algo mágico. Bien es cierto que hay veces que el ruido cercano a él, y sus prisas, desgastan. Quizas halla  estado demasiado acostumbrado al silencio y a una vida prácticamente dormida, donde todo lleva su tiempo...

Se que algún día estaré trabajando de lo que siento dentro, de lo que verdaderamente quiero, y quiero Felicidad. Y allí la regalan por kilos.